¿Cómo es la pelota diseñada para personas ciegas?

El ex basquetbolista argentino, Ricardo Molinari, creó el Básquet para Ciegos. Se trata de una innovadora iniciativa que se suma a las apuestas deportivas por la inclusión y la accesibilidad. Este deporte adaptado a personas no videntes cuenta con su propia reglamentación, tablero, cancha y una pelota particular. De esta forma, se aprovechan al máximo otros sentidos como el oído y el tacto.

La pelota que se utiliza en el Básquet para Ciegos se caracteriza por ser sonora. La misma posee bolillas metálicas -o rulemanes- en su interior que con el movimiento provocan ruido y orientan a los jugadores durante el partido. En cuanto al tamaño, se  trata de un balón N°5, similar a los utilizados en categorías mini. 

Los equipos competidores están conformados por 3 jugadores ciegos o disminuidos visualmente y un guía sin problemas de visión.

Tablero y aro

Otras referencias no visuales acompañan el recorrido de la pelota y de los jugadores. El tablero posee un sistema que permite la reproducción de sonidos guías que indican el rebote de la pelota y orientan al jugador en la cancha durante el partido. Los mismos están ubicados a una altura de 2,60 mts. 

Asimismo, los aros emiten un sonido intermitente que, al momento de lanzar la pelota, sirve al jugador para reconocer la dirección y altura que debe alcanzar el tiro para ser embocado. De esta forma, el jugador arroja el balón hacia donde percibe que está el sonido.

También contienen un sensor de distancia que repiquetea varias veces el ruido cuando la pelota pasa por el interior del aro, avisando al deportista que acertó el lanzamiento. 

Otra particularidad del aro es que tiene cadenas en lugar de sogas. El ruido que provoca el choque de la pelota con el metal hace saber al basquetbolista no vidente que falta altura en el lanzamiento, pero que está en la dirección correcta para anotar.

La cancha

En Argentina, la primera cancha de Básquet para Ciegos fue inaugurada el 24 de septiembre de 2021 en el Club Atlético Juventud de la ciudad de Pergamino, Buenos Aires. 

La misma mide 19×10 metros y tiene una cinta elástica de 1m de altura que rodea y delimita el campo de juego. 

A su vez, todas las demarcaciones en el suelo poseen relieve y las dos áreas limitadas de la cancha pueden reconocerse por la rigurosidad distinta en el piso, perceptible al tacto. También, hay marcas de guía rugosas de 25×5 cm ubicadas de frente al aro, a 45º y a 180º que sirven al momento del lanzamiento..

Previo al comienzo del partido, es necesario que los entrenadores informen  a los jugadores sobre las características del campo de juego, para que puedan desplazarse por la cancha aprovechando los recursos sonoros y táctiles al máximo.